RENDICIÓN
Y ACEPTACIÓN
Del
poder del aquí y el ahora. La sabiduría de la rendición. No te resistas al
dolor. Ríndete al dolor, a la desesperación, al miedo, a la soledad o a
cualquier forma que adopte el sufrimiento. Obsérvalo sin etiquetarlo mentalmente.
Déjalo estar. Abrázalo. A continuación, observa como el milagro de la rendición
transmuta el sufrimiento profundo en paz profunda. Eckhart Tolle.
Muchas
veces luchamos contra lo que no deberíamos hacerlo, porque al hacerlo estamos
fomentando su mayor resistencia. Es importante que comprendamos este modo de
pensar, a mayor insistencia más resistencia, a menor resistencia más
comprensión del dolor, por lo tanto, sanación, paz y armonía consigo mism@.
Dejar
de poner atención en aquello que nos molesta o incomoda, puede ser la mejor
manera para llegar a un buen final o solución. Es necesario encontrar la paz
interior para lograr el bienestar pleno del organismo. Es una paz que lleva a
la reconciliación y la aceptación de la propia persona, es encontrarse en un
estado de tranquilidad total.
El
dejar ir, veamos un riachuelo que transcurre de manera lenta, transparente y su
corriente sigue el camino elegido. Si buscamos estancarlo, otro camino seguirá
y quizá su contenido con mayor fuerza y volumen, dejará en su recorrido algunas
consecuencias. Mientras siga su camino “normal” y sin resistencia toda marcha
bien, y si buscamos un camino “anormal” con resistencia, el final será más
desastroso.
Por
eso, cuando una situación personal se vuelve insoportable, dolorosa, llena de
angustia e incertidumbre lo mejor es dejar ir, no poner resistencia, liberar
las energías y la presión del momento, abandonarse sin luchar con fuerzas
internas que no logramos comprender. El no etiquetarlo, nos dará una nueva
perspectiva de lo que estamos viviendo y como consecuencia permitirá la
tranquilidad y el bienestar.
Esta
es la paradoja de la rendición, si observamos la naturaleza, nada hay de
esfuerzo en ella para manifestarse llena de vida. Una planta, llegado el
tiempo, sale de la tierra, se abre a la luz y sigue su crecimiento de manera
natural. Acepta una situación por más dolorosa que sea, nuestra naturaleza
humana debe seguir su curso de modo natural, a su tiempo llegará la paz sin
poner resistencia, como fruto de la aceptación.
El
cambio de perspectiva significa, que dejemos de nombrar o etiquetar como algo
permanente, lo que es pasajero. El poder está dentro de un@ mism@. Dejemos de
dar fuerza o vida lo que es temporal. Seamos conscientes de nuestro “ahora”,
pongamos nuestra atención en este “instante”, y todo lo demás vendrá como una
bendición y sabiduría de la rendición.
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